Aquí está la reflexión de hoy: La calidad de tu trabajo revela tu carácter.

¿Te has dado cuenta de que tu trabajo dice mucho de ti? La Biblia nos dice que las obras de Dios nos revelan su naturaleza. La belleza de su creación, la majestad y la grandeza de su universo nos dan una visión clara de su carácter y personalidad.

Esto también se aplica a nosotros. Imagina que a alguien que no te conoce le pidieran que escribiera una descripción de ti, basándose en una auditoría e inspección de tu trabajo. ¿Qué revelaría esa auditoría?

¿Eres meticuloso en tu trabajo o revelaría tu trabajo una actitud descuidada? ¿Demuestra tu trabajo que eres considerado con la persona que lo recibe o con la siguiente etapa del proceso? ¿O concluiría el inspector que tienes prisa por terminar cuanto antes, porque tu trabajo es descuidado?

Cuando tu trabajo implica tratar con otras personas, ¿revelaría una actitud de respeto y preocupación por los demás? ¿Crees que el inspector concluiría que te preocupas por los demás y que tratas a todos con respeto? ¿O revelaría indiferencia hacia los demás, tratándolos como números sin molestarte en ser amable y considerado?

¿Podría alguien darse cuenta, por la calidad de tu trabajo, de que lo haces para el Señor? ¿Se vería diferente al de quienes no son cristianos?

Al contemplar la obra de Dios, comprendo mucho sobre su naturaleza amorosa y compasiva. Su obra me revela su carácter. Tu trabajo también revela el tuyo. ¿Te gustaría que alguien te describiera basándose en el trabajo que has realizado esta semana? Es una buena reflexión que debemos tener presente con frecuencia.

Recuerda que aquí encontrarás una copia de esta reflexión junto con un juego de tarjetas de Sabiduría para el Trabajo.