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¿Alguna vez pensaste: “Esta es una oración sin sentido? Nada va a cambiar en esta situación, así que ¿por qué me molestaría en orar al respecto? Bueno, si alguna vez te has sentido así, te animo a que creas que hay “Oraciones sin sentido”.
Ciertamente puedo relacionarme con ese sentimiento de orar por algo o alguien y luego sentir que no va a hacer ninguna diferencia. Pero recientemente Marcus Warner de Deeper Life Ministries me envió un artículo titulado “No hay oraciones sin sentido”, y lo leí con entusiasmo porque el título resonó en mí. ¿Es cierto que no hay oraciones sin sentido?
En su artículo, Marcus habla de un momento reciente en el que pensó en algunos amigos, una pareja, que aún no son creyentes y aún no han mostrado mucha inclinación a aprender sobre el cristianismo, y cuando se acordó de ellos, simplemente dijo una rápida oración para que llegaran a la fe salvadora. Inmediatamente después una voz interior le dijo Esa fue una oración sin sentido. Reconoció que este pensamiento había venido del enemigo, y más tarde escribió en su diario un mensaje de Dios para él:
“Escuché tus oraciones. No son inútiles. El incienso llega ante el trono de la gracia: un aroma maravilloso y dulce, de amor y adoración en un mundo que está roto y funciona mal. No hay oraciones sin sentido”.
Marcus continúa diciendo: “Esto me parece verdadero. Por supuesto, algunas oraciones son más efectivas que otras, pero es mejor orar mal que no orar en absoluto”.
¿Hay algo o alguien por quien has estado orando durante mucho tiempo y se siente inútil? no te rindas, en Lucas 18, Jesús nos dio la parábola de la viuda persistente que siguió rogando al juez que le concediera su pedido, lo que finalmente hizo simplemente porque ella era muy persistente. Jesús dijo que el propósito de esta parábola era mostrar a sus discípulos que siempre debían orar y no darse por vencidos.
Quiero animarte a orar siempre y a no dejar de orar por lo que está en tu corazón, aunque te parezca inútil. No hay oraciones inútiles.