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Continuamos la historia de Fran y Jesús en el trabajo. Fran está teniendo una semana difícil porque tiene dificultades para establecer límites. Es miércoles y apenas ha cumplido con la fecha límite para su cliente más importante, pero fue a expensas de las horas de anoche porque permitió que una compañera de trabajo la convenciera para que la ayudara durante “diez minutos”, que se convirtieron en tres horas. Y ahora está exhausta y con sueño, y está contando los minutos hasta que sea hora de irse a casa. Luego entra su jefe.

“Fran, si no estás ocupada esta noche, me encantaría que me acompañes a cenar con el vicepresidente de marketing, que está en la ciudad esta semana, ¿sabes? Le he estado contando sobre tu éxito y cuánto has contribuido al nuestro, y me preguntó si se uniría a nosotros. ¿Puedes?”

No lo hagas, Fran, parece decirle la voz interior del Espíritu de Dios, pero ¿cómo decir que no a esta oportunidad? Así que se escucha a sí misma diciendo: “Eso es muy amable de tu parte. Yo, uh, creo que puedo hacer que eso suceda. Déjame hacer una llamada y te avisaré”.

Ella llama a su mamá y le pregunta si puede traer a los niños esta noche por un corto tiempo. Luego, cuando llega a casa y les explica a los niños que tiene que salir a cenar con su jefe, Drew se queja: “Pero mamá, acordamos que me ayudarías con mi proyecto de ciencias esta noche. Lo prometiste.”

Vaya, eso es verdad. Ahora necesita convencer a sus padres de que vayan a su casa para que su papá pueda ayudar a Drew con su proyecto de ciencias. A ellos no les agrada, pero al igual que a Fran, les cuesta decir que no, así que acceden.

Bueno, la cena con el Vicepresidente no fue tan productiva como Fran había imaginado. Después de unos tragos, él contó algunas historias inapropiadas, hizo algunos comentarios que rozaban las insinuaciones sexuales y se convirtió en una situación bastante incómoda. Fran usó la excusa de llegar a casa con sus hijos para salir de la cena lo más temprano posible, pero aún eran más de las diez cuando llegó a casa. Con disculpas a sus padres, trató de limpiar parte del desorden del proyecto de ciencias, poner su casa en condiciones decentes y acostarse a medianoche.

Negarse a establecer límites tiene consecuencias para ti y para otras personas en tu vida.