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Has adquirido habilidades y experiencia en tus trabajos que han resultado muy beneficiosas para tu carrera, y esas habilidades y capacidades han sido una parte importante de tu crecimiento. Simplemente detente a pensar en cómo tus trabajos te han enseñado muchas habilidades y te han hecho más productivo y seguro. Creo que, en medio de horarios apretados, plazos y dificultades, es fácil pasar por alto las muchas cosas buenas que estás aprendiendo y las formas en que estás creciendo simplemente al hacer tu trabajo cada día.
Además, piensa en las muchas habilidades para la vida y las relaciones que estás adquiriendo, incluso mientras lo haces. Puede parecer más una experiencia de aprendizaje que una experiencia de formación. Aquí tienes algunos ejemplos de cosas prácticas e importantes que deberías aprender en un trabajo, si realmente estás haciendo un buen trabajo allí. Aprendes:
- La importancia de ser puntual.
- La importancia de cumplir con los plazos.
- Cómo trabajar en equipo para completar una tarea.
- Lo crucial que es cumplir con tus promesas y compromisos.
- ¡Que es muy importante hacer todo con excelencia y evitar repetirlo!
- Que la procrastinación es mortal.
- Que no puedes permitirte dejar pasar las cosas por alto.
Estas son solo algunas de las cosas prácticas que aprendes al aceptar la responsabilidad de un trabajo. Sin duda, un trabajo bien hecho requiere este tipo de habilidades. Y si no estás dispuesto a aprenderlas y crecer en estas áreas, esto afectará tu progreso, tus ascensos y tu sueldo; te frenará.
Te pediría que analizaras tus hábitos de trabajo. ¿Estás aprendiendo estas cosas o te resistes a ellas? ¿Te has ganado una reputación dentro de tu organización de estar verdaderamente comprometido con hacer tu trabajo con excelencia, con mejorar, aprender y crecer? A menudo he dicho que un seguidor de Cristo puede no ser la persona más inteligente, educada o experimentada en su trabajo, pero puede ser la más confiable, la más trabajadora y tener el mayor nivel de integridad. No importa lo que hagas o adónde te lleve Dios, estas características siempre serán importantes para tu éxito y para agradar a Dios.