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¿Cómo una mujer cristiana trabajadora, o un hombre, que tiene que levantarse temprano todos los días, que muchas veces se ocupa de los niños y tiene muchos deberes, que tiene que usar muchos sombreros y trabajar muchas horas, cómo tu y yo incorporamos la alabanza en nuestros horarios y estilos de vida diarios?

Primero, ten en cuenta esto: la alabanza no es una función de nuestras emociones. ¡No es un sentimiento! No quiero decir que nunca tengamos sentimientos cuando alabamos a Dios, pero la alabanza no depende de lo que sentimos. La alabanza se hace con nuestra mente, con nuestra voz, con nuestra voluntad. Por lo general, las emociones seguirán, pero ya sea que lo hagan o no, debemos fijar nuestra mente y voluntad para alabar a Dios.

En segundo lugar, la alabanza debe ser continua. Necesitamos incorporarlo a lo largo de nuestro día. En el Salmo 71: 8 leemos: “Mi boca está llena de tu alabanza, declarando tu esplendor todo el día”. Estuve meditando sobre esto y dije: “Señor, ¿cómo puedo alabarte todo el día cuando tengo que hacer tantas otras cosas?” Y pensé en Daniel, en cómo alababa a Dios tres veces al día.

Tengo una sugerencia: haz tarjetas con versículos de alabanza. Luego colócalos junto a tu cama y antes de levantarte de la cama, toma una y dila en voz alta: las primeras palabras que salen de tu boca por la mañana. Luego ten alguna en tu trabajo, y en un descanso, detente y di ese versículo en voz alta. Luego, por la noche, las últimas palabras que diga antes de tocar la almohada pueden ser palabras de alabanza mientras lees uno de esos versículos en voz alta.

Esa sería una forma muy intencionada de alabar a Dios como lo hizo Daniel: tres veces al día. Y lo haces por obediencia y amor a Jesús. Creo que Dios honrará ese tipo de compromiso de alabar a Dios en todo momento, durante todo el día.

Hemos preparado un conjunto de tarjetas de alabanza que nos complace compartir contigo. Puedes encontrarlas en nuestro sitio web, donde puede imprimirlas tú mismo, o llámanos y te enviaremos un paquete. Espero que realmente comiences a practicar esta maravillosa disciplina espiritual de alabar a Dios en todo momento. Hará una gran diferencia en tu vida.

Tarjetas de Alabanza