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¿Cómo reconocemos las señales de alto de Dios?
Bueno, aquí hay algunos puntos de control para ayudarte a determinar si es hora de detenerse. Cuando consideres algún plan, situación o proyecto, pregúntate:
- ¿Hay algo en esto que no esté en línea con la Palabra escrita de Dios?
Hay momentos en los que queremos hacer algo tan mal, que racionalizamos los principios obvios establecidos en la Palabra de Dios. Por ejemplo, eres soltero y has conocido a alguien con quien realmente te gustaría salir, pero es bastante obvio que él o ella aún no es creyente, no comparte tu compromiso con Jesucristo. Detente y piensa en ello: ¿a dónde puede llevarte esto, sino a la angustia? La Biblia dice que no debemos unirnos en yugo desigual con los no creyentes, y aunque las citas no son un “yugo” oficial, es donde comienzan. Te casarás con alguien con quien hayas salido por primera vez, así que si no sales con un no creyente, has evitado esa elección equivocada.
- ¿Tienes paz en tu espíritu acerca de esto?
La voluntad de Dios para nuestras vidas, aunque a menudo desafiante, aún nos dará ese conocimiento interno y la paz de que ésta es la forma en que debemos caminar. Si tu espíritu sigue inquieto por esto, entonces detente y espera. En caso de duda, ¡no lo hagas! Detente y examina por qué dudas, y no te muevas hasta que esas dudas se resuelvan.
- ¿Has buscado asesoría o consejo sabio?
Proverbios 15:22 dice: ” Los planes fracasan por falta de consejo; muchos consejeros traen éxito.”. A menudo es muy bueno detenerse y buscar el consejo de una persona objetiva que tenga conocimiento y sea verdaderamente sabia.
- ¿Estás dispuesto a hacer la voluntad de Dios sin importar lo que sea?
Muy a menudo solo queremos que Dios bendiga nuestras iniciativas. Pregúntate si realmente quieres solo lo que Dios quiere. Realmente deseas poder decir: “Solo quiero hacer la voluntad de Dios, sea lo que sea”.
Por lo tanto, detente y verifica antes de hacer cualquier movimiento. Estarás feliz de haberlo hecho.