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A través de nuestra historia de Fran, hemos estado hablando sobre el tema de la depresión clínica. Fran ha animado a su buena amiga, Louise, a buscar ayuda médica para su estado mental depresivo, y Louise ahora está comenzando a tomar un medicamento recetado para ver si realmente la ayudará a salir de esta depresión.

Al día siguiente, Fran está hablando con su amiga doctora en la iglesia, Anne. “Espero que esto ayude a Louise”, dice. “Pero ¿y si no lo hace?”

“Bueno, Fran, si Louise tiene otros problemas, como el pecado en su vida, la medicación no lo solucionará. Pero dijiste que no sabes de ningún problema existente de ese tipo, así que podría ser que esta medicación pueda ayudarla a recuperarse, si sabes a qué me refiero”.

“Oh, eso sería maravilloso”, dice Fran.

“Pero recuerda, a veces los médicos tienen que probar varios tipos de medicamentos diferentes antes de encontrar el adecuado”, le recuerda Anne.

“Sí, eso es lo que nos advirtió la Dra. Monroe ayer”, dice Fran. “Y recomendó encarecidamente que Louise también fuera a terapia. Creo que eso molestó a Louise. ¿Tú qué opinas?”

“Bueno, rara vez estas depresiones son causadas únicamente por razones físicas. Por lo general, es una combinación de estrés, perfeccionismo o adicción al trabajo junto con un desequilibrio químico”, le informa Anne. “Por lo tanto, estoy de acuerdo en que Louise debería ver a un consejero cristiano, al menos para asegurarse de que no está viviendo en la negación de otras áreas que podrían estar contribuyendo a su problema”.

“La voy a animar a que lo haga”, dice Fran. “Y la voy a animar a pasar aún más tiempo con la Biblia y la oración. Dice que le ha resultado muy difícil leer la Biblia u orar desde que esta depresión la atacó”.

“Es una reacción típica, Fran, y estoy segura de que el enemigo de nuestra alma se acerca en momentos como estos para empeorar las cosas”, dice Anne.

“Bueno, voy a orar más por ella y orar más con ella. Al menos puedo hacer eso por ella, mientras que a ella le resulta difícil orar por sí misma”, dice Fran.

Con una buena amiga como Fran, Louise tendrá el apoyo que necesita para recuperarse de esta depresión. Todos debemos ser más sensibles y conscientes de las necesidades de otras personas que puedan estar pasando por algo así. Es un momento para reunirnos con esa persona y ayudarla, no abandonarla.