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Fran almorzó con Joyce, una asistente de su departamento, que es madre soltera como Fran. Jesús le ha pedido a Fran que ore por Joyce y que intente conocerla.

Mientras almuerzan, Joyce le cuenta su historia sobre la negligencia de su exmarido al pagar la manutención de los hijos y la guardería que amenaza con negarse a recibir a su hijo porque Joyce está atrasada en sus pagos. Mientras Joyce se seca las lágrimas, Fran le dice: “Oh, Joyce, lo entiendo; no hay nada más importante que tu hijo y su cuidado mientras trabajas. ¿Cuánto dinero le debes a la guardería?”

“Estoy atrasada como en unos 400 dólares. Y Fran, simplemente no tengo dinero”, responde Joyce.

“¿Y tu familia?”, pregunta Fran, “¿Pueden ayudarte?”

“¿Familia? ¿Estás bromeando? Mi familia…”, su voz se apaga. Es demasiado doloroso para ella incluso hablar de ello.

A Fran se le ocurre una idea y dice: “Mira, Joyce, nuestra iglesia tiene un fondo para ayudar a las personas que tienen problemas económicos. Como miembro, puedo pedir ayuda para ti. ¿Te parece bien si les pido que te ayuden a pagar lo que debes a la guardería?”

Joyce mira a Fran desconcertada. “¿Lo harías por mí? ¿Pero por qué?”

“¿Por qué? Sólo porque necesitas ayuda y yo quiero ayudarte. Lo pagaría yo misma si pudiera. Ahora bien, no puedo garantizar que lo hagan, pero al menos puedo pedirlo. ¿De acuerdo?”

“Sí, de acuerdo…” Joyce se pone la cabeza entre las manos y solloza en silencio.

Fran se acerca a la mesa y le toma la mano. “Sabes, Joyce, no es casualidad que te haya invitado a almorzar hoy, ¿verdad? Creo que es la manera que tiene Dios de mostrarte que te ama y que va a cuidarte”.

Joyce levanta la vista. “No estoy segura de creer siquiera que existe un Dios, Fran, pero agradezco tu ayuda. Perdón por estar tan sensible; es solo que… bueno, he estado muy preocupada por Toby. Al menos me has dado algo de esperanza”.

Bueno, Fran ha descubierto que Joyce está en su vida para poder mostrarle el amor de Jesús. ¿Hay alguien en tu vida en este momento que necesite un poco de compasión y comprensión? Recuerda, esa persona no está en tu vida por accidente.