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Presentado por Lisa Bishop
¿Cuál es tu estado de ánimo?
El otro día me encontré con una foto que algunos amigos habían tomado mientras estaban parados bajo un letrero de neón que decía: “Estado mental soleado”. Al estar en Florida, también conocido como “El Estado del Sol”, pensé que el letrero era un inteligente juego de palabras. También me hizo pensar. ¿En qué estado se encuentra tu mente?
Si te tomas un tiempo intencional para considerar dónde está tu espacio mental en estos días, ¿qué dirías? En otras palabras, ¿cuál es tu estado mental? ¿En qué pensamientos se ha estado fijando tu mente? Estas son preguntas importantes que debes hacerte porque los pensamientos en los que te concentras, tu forma de pensar, lo que te propones, son importantes. Los pensamientos en los que te permitas persistir no sólo afectarán la calidad de tu vida sino también su trayectoria. Porque donde van tus pensamientos, tu vida seguirá.
El apóstol Pablo habla de la importancia de prestar atención al estado de la mente en 2 Corintios 10:5: “Destruimos todo obstáculo de arrogancia que impide que la gente conozca a Dios. Capturamos los pensamientos rebeldes y enseñamos a las personas a obedecer a Cristo”.
Lleva cautivo cada pensamiento. Aquí Pablo denuncia cualquier cosa que vaya en contra del evangelio de Jesucristo, la verdad de la Palabra de Dios, y deja claro que tus pensamientos son un tipo de fortaleza que puede mantenerte como rehén. En otras palabras, cualquier pensamiento falso, cada pensamiento que tengas que no esté alineado con la verdad de quién es Dios, quién eres tú, cómo ves a los demás, debe ser borrado y hecho obediente a Jesús. Y, a medida que realineas tu mente para someterte a la autoridad de Cristo, animas a otros a hacer lo mismo.
Tu mente es un campo de batalla y debes asegurarte de no permitir que los engaños de Satanás se afiancen. Tus pensamientos pueden convertirse en una fortaleza que te mantenga cautivo de pensamientos falsos. ¡Jesús quiere que le presentes tus pensamientos para que él los gobierne en lugar de que el enemigo te arruine!
Entonces, ¿cuál es tu estado de ánimo? ¿Estás pensando en derrota, indignidad, celos, ira, lástima, superioridad? ¿Qué pensamientos te mantienen cautivo y dirigen tu vida que necesitan ser mantenidos cautivos y hechos obedientes a Cristo? Este es un recordatorio amistoso para exponer cada pensamiento erróneo a la luz de las Escrituras y en cada lugar donde encuentres pensamientos erróneos, lucha contra ellos con la verdad de la Palabra de Dios. Disciplina tu mente.