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¿Crees que el Dios que adoramos los cristianos, el Dios de la Biblia, es el único Dios verdadero, que tiene todo poder y autoridad, que tiene toda sabiduría y conocimiento, que es santo y perfecto y que no se equivoca? Ciertamente esto es lo que nos dice la Biblia, pero lo que te estoy preguntando es, ¿realmente crees que Dios es así?
Puede ser que hayas dado tu consentimiento intelectual a la enseñanza de la Biblia acerca de Dios, pero esa creencia nunca se ha convertido en una realidad apasionante en tu vida diaria.
Si estás convencido de que el carácter, el poder y la personalidad de Dios son como se afirman, el siguiente tema importante que debes comprender es cómo se siente este Dios por ti. Después de todo, no eres más que un detalle en esta gran masa de humanidad. ¿Haces alguna diferencia para Dios?
Permíteme recordarte algunas Escrituras que nos dicen cómo se siente Dios acerca de ti individualmente. Mateo 10:30 nos dice: “y él les tiene contados a ustedes aun los cabellos de la cabeza”. Cada vez que te cepillas el cabello y ves los cabellos en tu cepillo o en el piso, debes recordar que Dios acaba de volver a calcular todos esos cabellos perdidos, ¡y está manteniendo un total acumulado en todo momento! ¿A quién más le importaría cuántos cabellos hay en tu cabeza? Leemos que se preocupa por los gorriones sin valor y sin color y conoce a cada uno que cae al suelo. ¿No puedes creer que Dios se preocupa mucho más por ti?
Leemos en Sofonías 3:17: “porque el Señor tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso.
Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, se alegrará por ti con cantos” ¿Sabías que Dios se deleita en ti y canta sobre ti? ¿No es increíble?
Hay muchos pasajes en la Biblia que nos dicen claramente que el Dios de todo el universo se preocupa por cada uno de nosotros individualmente, nos conoce íntimamente y quiere para nosotros solo lo mejor y lo más alto. Sus planes para ti son buenos planes.
Ahora, si estás conmigo hasta aquí, si crees que Dios tiene todo el poder, la sabiduría, el conocimiento y la autoridad, y además, te ama y se preocupa por tu bien, esta es la siguiente conclusión lógica a la que conducen esas creencias: Los planes de Dios para ti son siempre superiores a cualquier otro plan.
Puedes confiar en él y en sus planes para tu vida sin dudarlo. No solo puedes confiar en él, sino que es lo único lógico que puedes hacer. ¿Por qué querrías confiar en alguien más, incluso en ti mismo? Si tu confianza está en alguien además de Dios, te estás conformando con mucho menos de lo que deberías.
Si tienes miedo de confiar en Dios, entonces algo debe estar mal en tu comprensión de quién es Dios o en lo que siente por ti. O bien, tu creencia es solo una creencia mental y aún no ha cambiado tu corazón.