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  1. El amor es alentador.

¿Te considerarías una persona alentadora? Recibí un correo electrónico de aliento de un compañero de trabajo el otro día. Me reafirmó por el trabajo que hice liderando un proyecto.

Cuando abrí y leí el correo electrónico, me sorprendió. Este individuo en particular es una persona de muy pocas palabras. Es bastante reservado y callado, así que cuando me envió una “felicitación”, me sorprendió mucho. También estaba súper agradecida. El hecho de que se tomara el tiempo de enviar una nota de aliento fue un gesto muy amable.

¿Cuándo fue la última vez que le dijiste palabras de aliento o animó a alguien?

El otro día estaba almorzando en un restaurante cercano cuando escuché a la gerente gritar “¡Bien hecho equipo!”. Nunca escuché a un gerente de restaurante dar un grito para animar a su equipo. Realmente me impresionó escucharla alentar a sus empleados.

El estímulo puede dar vida a las personas. La afirmación genuina puede ser justo lo que alguien necesita para seguir adelante.

Proverbios 16:24 dice: ” Las palabras amables son como la miel: dulces al alma y saludables para el cuerpo”.

Ha habido momentos en mi vida en los que me he preguntado dónde me quiere Dios y si estoy logrando un impacto en mi ministerio. Cuando de la nada, recibo un mensaje de texto o una nota escrita a mano de alguien que expresa gratitud por algo que hice o una conversación que tuvimos que marcó la diferencia para ellos. Sé que el Espíritu Santo puso en sus corazones el escribirme en el momento perfecto en el que necesitaba ser estimulada. Y estoy muy agradecida de que prestaron atención al Espíritu porque él los usó para recordarme que me mantuviera el rumbo.

1 Tesalonicenses 5:11 nos recuerda “Así que aliéntense y edifíquense unos a otros!”. ¿A quién puedes hablar de vida hoy con una palabra de aliento? Tal vez sea un compañero de trabajo al que puedas decirle palabras de afirmación, o un amigo al que puedas animar. ¿A quién puedes animar esta semana, cara a cara, enviar un mensaje de texto, un correo electrónico o una nota escrita a mano? ¿Con quién puedes practicar el hábito amoroso de animar? Es una doble victoria. Serán bendecidos por tus palabras genuinas y positivas y tú recibirás un impulso al bendecir a alguien.

Aquí hay un versículo corto pero poderoso de 1 Corintios 16:14 que resume todo. “Y hagan todo con amor”.

En cada circunstancia, con cada persona con la que te encuentres. Se Jesús … se amor.