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¡Los cristianos son como calabazas! Esta temporada cuando las calabazas están maduras y las usamos para todo tipo de platos deliciosos, además de decoración, es interesante ver cómo somos como esas calabazas.

Por ejemplo, primero se deben recoger las calabazas del huerto, traerlas y limpiarlas. Y cuando nacemos de nuevo y somos hechos nuevas criaturas en Cristo, él nos elige de nuestros sucios huertos de calabazas, nos trae a su familia y nos limpia del pecado y la suciedad de este mundo.

Es cierto que nunca queremos detenernos en nuestro pasado y vivir arrepentidos. Lo que Dios ha perdonado y nosotros hemos abandonado ya no debería mantenernos en cautiverio. Pero también es cierto que necesitamos recordar dónde estábamos antes de que Cristo nos sacara de nuestro sembradío de calabazas. A. W. Tozer ha escrito:

“La única defensa segura contra la justicia propia es cultivar un estado tranquilo de penitencia continua. Un recuerdo dulce pero aleccionador de nuestra culpa pasada y el conocimiento de nuestras imperfecciones presentes no son incompatibles con el gozo del Señor; y son de inestimable ayuda para resistir al enemigo.”

Recuerda tu huerto de calabazas hoy, el lugar en el que estabas antes de que Cristo te recogiera y te trajera. Recuerda, y da gracias porque te ha redimido de esa vida y te ha dado nueva vida y esperanza para un futuro brillante.

Debido a que se nos ha dado nueva vida en Cristo, nuestro comportamiento y nuestras actitudes deben ser gozosas, ¿no crees? Puede que estés en un lugar en el que no quieras estar, en un trabajo que no te entusiasme, tratando con gente que no te gusta. Pero tienes una maravillosa oportunidad, justo en ese lugar, de ser un testigo de Jesús simplemente siendo una persona alegre y positiva. Después de todo, has sido salvado de la huerta de calabazas y tienes todos los motivos para regocijarte. Entonces, hoy, donde Dios te haya plantado ahora, haz el compromiso de regocijarte todo el día mientras recuerdas que has sido rescatado del sembradío de calabazas y hecho nuevo en Cristo.